Carta de John Wick (no enviada)

Para quien alguna vez me amó… o tal vez, para nadie.

No sé si alguien leerá esto. Quizás nadie. Quizás vos, Helen.

Aunque estés muerta. Aunque yo ya no esté.

Pero necesitaba escribirlo… porque disparar ya no alcanza.

Porque las palabras son lo único que no se oxidan en mis manos.

Me preguntan por qué volví. Por qué no me quedé en la tumba en la que el mundo me había olvidado.

La respuesta siempre fue la misma: porque me lo quitaron todo.

Pero esa no es toda la verdad.

Volví porque no supe cómo seguir sin vos.

Porque no sé vivir en paz si no es con tu mano en la mía.

Intenté que la venganza llenara el hueco.

Quise creer que hacerlos caer me haría justicia.

Pero el rostro del que maté nunca fue el tuyo.

Y cuando la sangre se seca, lo único que queda es el eco…

…y la soledad.

Helen… si estás en algún lugar —si todavía podés verme—

quiero que sepas que lo intenté.

Intenté ser mejor. Intenté salir.

Pero me arrastraron de nuevo… y yo no tuve la fuerza para quedarme afuera.

No hay redención en este mundo para hombres como yo.

Pero tal vez haya silencio. Tal vez haya olvido.

Tal vez, al final del camino, encuentre algo que se parezca a tu voz.

Si alguna vez alguien encuentra esta carta, que no me llore.

No soy un héroe.

Solo fui un hombre que amó demasiado, y que perdió.

Y si algún día alguien pregunta por John Wick, que le digan esto:

“Fue un hombre que amó a su esposa más de lo que amó a la guerra. Pero la guerra no lo dejó ir.”

Goodbye, Helen.

Goodbye, mundo.

John